La información se ha convertido en uno de los activos más valiosos para las empresas. Sin embargo, muchas organizaciones subestiman el impacto financiero que puede tener la pérdida de esta información, ya sea por un ciberataque, un error humano o fallos en los sistemas.
La pérdida de información ocurre cuando datos críticos de una empresa son eliminados, inaccesibles o sustraídos de manera no autorizada. Esto puede incluir:
El origen de esta pérdida puede ser variado: desde ataques de ransomware hasta un simple error humano.
Existen diferentes tipos de costes que se deben tener en cuenta para evaluar el impacto real que ha tenido una fuga de datos en una empresa. Estos se dividen en
Dentro de los costes directos se debe tener en cuenta la recuperación de datos y las multas y sanciones derivadas a la fuga de datos.
Dentro de la recuperación de datos se incluye la contratación de servicios especializados para recuperar la información perdida.
Además se deben añadir los costos por multas y sanciones por el incumplimiento de normativas como el RGPD.
La pérdida de información puede paralizar las operaciones, afectando la capacidad de la empresa para generar ingresos.
Al verse afectada la actividad, esto puede conllevar además, pérdidas económicas por la fuga de clientes que pierden la confianza en la empresa.
Una brecha de seguridad o la pérdida de datos puede dañar de forma irreparable la imagen de una empresa, lo que afecta tanto a su posición en el mercado como a sus relaciones comerciales.
Después de un incidente, muchas empresas se ven obligadas a invertir en soluciones tecnológicas y formación para evitar futuros problemas. Esto supone una gran inversión extra en ciberseguridad.
Por otro lado, los afectados por la pérdida de datos podrían emprender acciones legales contra la organización.
Puedes hacer una simulación del coste que supondría para tu empresa sufrir un ciberataque o una fuga de datos en el siguiente enlace, de la mano de ESED - Cyber Security & IT Solutions: https://www.esedsl.com/calcula-coste-ciberataque.
Utilizar soluciones como firewalls, sistemas de detección de intrusos y herramientas de cifrado es fundamental para proteger los datos.
Implementar copias de seguridad automáticas y almacenar los datos en múltiples ubicaciones garantiza la recuperación en caso de incidentes.
Muchas pérdidas de datos ocurren por errores humanos. Capacitar a los empleados en prácticas de ciberseguridad puede minimizar estos riesgos.
Adoptar normativas como el RGPD no solo ayuda a evitar multas, sino que también fortalece las medidas de seguridad en la organización.
En WWatcher, entendemos que la seguridad de la información es esencial para la continuidad del negocio. Por eso ofrecemos soluciones personalizadas que ayudan a las empresas a:
El costo de la pérdida de información va mucho más allá del impacto inmediato en las finanzas. También afecta la reputación, la operatividad y la confianza de los clientes. Adoptar medidas preventivas y contar con el apoyo de expertos como WWatcher puede marcar la diferencia entre un incidente menor y una catástrofe financiera.